La calidad de vida de vida de las personas cuidadoras está condicionada por: su contexto, el grado de dependencia del familiar, y el soporte formal (ayudas y recursos públicos) e informal (familiares, amigos, allegados). El impacto de las secuelas del ictus puede ser elevado, ya que se generan grandes necesidades de cuidado y atención, a menudo con un alto coste emocional y de económico. Se considera que es uno de los sucesos vitales estresantes mayores al cambiar de forma drástica la vida del familiar cuidador. Por este motivo, la asociación organiza este taller con el fin de reducir la sobrecarga de estas personas; mejorar su bienestar y salud física, mental y social; y ofrecerles apoyo, soporte y recursos relacionales. Por lo señalado anteriormente, consideramos que además de actuar sobre la prevención del estrés, la adaptación a los cambios, los autocuidados y el manejo emocional a título individual, debemos esforzarnos por lograr que el tema del cuidado suba puntos en las agendas políticas. Si bien el cuidado es un bien necesario y humanizador, el actual modelo se revela insuficiente y disfuncional ocasionando efectos no deseados en la persona cuidada, en la que cuida (mayoritariamente las mujeres) y en el conjunto de la sociedad.
Entradas recientes
Archivos
- junio 2024
- mayo 2024
- abril 2024
- marzo 2024
- febrero 2024
- enero 2024
- diciembre 2023
- noviembre 2023
- septiembre 2023
- agosto 2023
- junio 2023
- mayo 2023
- abril 2023
- marzo 2023
- febrero 2023
- diciembre 2022
- noviembre 2022
- septiembre 2022
- agosto 2022
- julio 2022
- mayo 2022
- abril 2022
- marzo 2022
- febrero 2022
- enero 2022
- diciembre 2021
- noviembre 2021
- octubre 2021
- septiembre 2021
- agosto 2021
- julio 2021
- junio 2021
- marzo 2021
- febrero 2021
- enero 2021
- diciembre 2020
- octubre 2020
- septiembre 2020
- julio 2020
- junio 2020
- abril 2020
- marzo 2020
- febrero 2020
- enero 2020
- diciembre 2019
- noviembre 2019
- octubre 2019
- septiembre 2019
- agosto 2019
Comentarios recientes